Dé un Paso de Obediencia
Una de las maneras de mantenerse avanzando es simplemente siendo obediente a Dios; usted puede simplemente hacer lo que Él lo guíe a hacer. Muévase en obediencia y vea como Dios bendecirá cada paso que tome.
Dé un Paso de Obediencia
Una de las maneras de mantenerse avanzando es simplemente siendo obediente a Dios; usted puede simplemente hacer lo que Él lo guíe a hacer. Lo pasos que Él le pida tomar pueden ser pequeños o grandes, pueden ser incluso inesperados, pero seguir a Dios es la única manera en que podrá llegar al destino correcto.
Sigo pensando en los israelitas y en la manera en que la nube de la presencia de Dios los guío a través del desierto. La nube cubría el tabernáculo, y la Biblia dice que cuando la nube avanzaba, los israelitas se movían, y cuando permanecía, permanecían.
Nunca sabían cuándo se iba a mover, pero tenían que estar listos para avanzar cuando Dios lo hiciera (Números 9:16-23). ¿Está listo para eso? Estoy segura de que algunas veces no tenían ganas de avanzar cuando Dios los instaba a hacerlo, pero si querían salir sanos y salvos del desierto, tenían que confiar en la dirección de Dios.
Necesitamos vivir en un estado de disposición, como soldados que han sido puestos en alerta. Cuando eso sucede, los soldados saben que pueden ser llamados a servicio activo en cualquier momento.
Cuando los doctores están en servicio deben estar listos en cualquier momento para ir y atender a una persona enferma. No importa cuáles sean sus planes o lo que estaban haciendo. Cuando reciben la llamada, acuden al llamado.
En uno de mis congresos, estaba buscando en mi Biblia durante la adoración, y de pronto vino a mi corazón que debería darle mi Biblia a una mujer en particular que acababa de compartir su testimonio unos minutos antes.
Sentí fuertemente que debía dársela cuando terminara de predicar esa noche. Ahora bien, tengo que decirle que no estaba esperando eso para nada, y que realmente me gustaba esa Biblia; tenía cantidad de notas en ella. De hecho, la Biblia tenía notas sobre las siete mayores lecciones que había aprendido en la vida escritas en ella.
Pero sentí fuertemente que el Señor me estaba instruyendo a que se la diera. Ahora bien, yo no sabía por qué Dios me estaba pidiendo que me moviera en esa dirección. Probablemente eso iba a animar realmente a esa mujer, o quizá el Señor solo estaba viendo si yo sería obediente.
Pero sin importar la razón, tenía una decisión que tomar: actuar en obediencia o ser desobediente. Tomé la decisión correcta en ese momento, pero ha habido otras ocasiones en que no lo he hecho y siempre termino con remordimientos.
¡La única manera en la que podemos vivir sin remordimientos es hacer lo correcto ahora! ¿Qué es lo que Dios le ha puesto en el corazón a hacer? ¿Le ha pedido que perdone a alguien que lo lastimó? ¿Que bendiga a alguien que esté luchando? ¿Que cambie un hábito destructivo? ¿Que deje una relación disfuncional? ¿Animar a un amigo? ¿Confrontar un asunto? Lo que sea que el Señor le esté pidiendo que haga, no vacile otro momento.
Muévase en obediencia y vea como Dios bendecirá cada paso que tome. Verdaderamente creo que la desesperanza viene con la inactividad, pero nuestra esperanza florece cuando nos estamos moviendo al paso de Dios.
Recientemente escuché que hablando físicamente, entre más se mueva, más será capaz de moverse, y que entre menos se mueva, menos capaz es de moverse. Si la gente se retira y se sienta y no hace nada, su salud comienza a menguar y cada vez pueden hacer menos y menos.
No obstante, la edad no parece importar con esos individuos que permanecen activos y se rehúsan a rendirse ante la vida. Del mismo modo, creo que entre más rápidamente nos movamos con Dios, será más fácil hacerlo. Si ha estado congelado por temor por largo tiempo, podría tomar un esfuerzo adicional comenzar a avanzar de nuevo, pero valdrá la pena.