¿Sinceridad o Hipocresía?
Predican que no se ha de robar y roban; que no se debe adulterar y adulteran; que hay que rechazar a los ídolos y cometen sacrilegio. ¿Cómo puede ser que jactándose de ser poseedores de la Ley, la rompan y así deshonren a Dios?
¿Sinceridad o Hipocresía? Predicas Cristianas cortas de Ivan Tapia
"He aquí, tú tienes el sobrenombre de judío, y te apoyas en la ley, y te glorías en Dios, y conoces su voluntad, e instruido por la ley apruebas lo mejor, y confías en que eres guía de los ciegos, luz de los que están en tinieblas, instructor de los indoctos, maestro de niños, que tienes en la ley la forma de la ciencia y de la verdad.
Tú, pues, que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo? Tú que predicas que no se ha de hurtar, ¿hurtas? Tú que dices que no se ha de adulterar, ¿adulteras? Tú que abominas de los ídolos, ¿cometes sacrilegio? Tú que te jactas de la ley, ¿con infracción de la ley deshonras a Dios? Porque como está escrito, el nombre de Dios es blasfemado entre los gentiles por causa de vosotros." Romanos 2:17-24
En su carta a los cristianos de la Roma del César, San Pablo ya habló a los gentiles(no judíos) y ahora se dirige a los judíos. Les dice que llevan tal nombre, basan toda su vida en la Ley y están muy orgullosos de ser el pueblo escogido de Dios.
Ellos conocen la voluntad de Dios que les ha hablado por medio de Moisés y los profetas; han recibido la Torá y los Diez Mandamientos. Por tanto tienen los conocimientos para aprobar lo mejor.
San Pablo, de un modo casi irónico, le escribe a los judíos: Ustedes se consideran "guías de los ciegos", una luz en las tinieblas, instructores de ignorantes, verdaderos pedagogos. Además son poseedores de la Ley como su máxima ciencia y verdad.
Sin embargo, ya que enseñan a otros, ¿por qué no se enseñan a si mismos?
Predican que no se ha de robar y roban; que no se debe adulterar y adulteran; que hay que rechazar a los ídolos y cometen sacrilegio. ¿Cómo puede ser que jactándose de ser poseedores de la Ley, la rompan y así deshonren a Dios?
El apóstol acusa a los judíos de inmorales, hipócritas e inconsecuentes. En ustedes, les dice, se cumple lo que el Señor advirtió: "...el nombre de Dios es blasfemado entre los gentiles por causa de vosotros."
"Pero actué a causa de mi nombre, para que no se infamase a la vista de las naciones ante cuyos ojos los había sacado." (Ezequiel 20:14)
En el caso nuestro, cristianos de hoy, que leemos y conocemos la Biblia, que nos consideramos amantes de Dios, seguidores de Jesús y Su doctrina... Sin embargo no perdonamos, rechazamos personas, discriminamos a los diferentes a nosotros, guardamos rencores, envidiamos, murmuramos, etc.
Con nuestras actitudes de falta de AMOR, negamos a Cristo, avergonzamos a Dios y desprestigiamos el cristianismo, la Iglesia y el Evangelio.
Como los judíos de la época de Jesús y los apóstoles, muchos cristianos nos hemos convertido en personas muy religiosas pero sin AMOR.