Promesas de Dios en la Biblia sobre la Adoración
1 CRÓNICAS 16:25
Porque el SEÑOR es grande,
y digno de toda alabanza;
¡más temible que todos los dioses!
SALMO 29:2
Tributen al SEÑOR la gloria que merece su nombre;
póstrense ante el SEÑOR en su santuario majestuoso.
ÉXODO 15:1 - 2
Cantaré al SEÑOR, que se ha coronado de triunfo
arrojando al mar caballos y jinetes.
El SEÑOR es mi fuerza y mi cántico;
él es mi salvación.
Él es mi Dios, y lo alabaré;
es el Dios de mi padre, y lo enalteceré.
Adoración | Promesas de Dios
Promesas de Dios en la Biblia sobre la adoración: 1 CRÓNICAS 16:25 Porque el SEÑOR es grande, y digno de toda alabanza; ¡más temible que todos los dioses!
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SALMO 43:4
Llegaré entonces al altar de Dios,
del Dios de mi alegría y mi deleite,
y allí, oh Dios, mi Dios,
te alabaré al son del arpa.
SALMO 95:6
Vengan, postrémonos reverentes,
doblemos la rodilla
ante el SEÑOR nuestro Hacedor.
SALMO 100:2
Adoren al SEÑOR con regocijo.
Preséntense ante él con cánticos de júbilo.
HEBREOS 12:28
Así que nosotros, que estamos recibiendo un reino inconmovible, seamos agradecidos. Inspirados por esta gratitud, adoremos a Dios como a él le agrada, con temor reverente.
ROMANOS 12:1
Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.
MALAQUÍAS 4:2
Si no me hacen caso ni se deciden a honrar mi nombre —dice el SEÑOR Todopoderoso—, les enviaré una maldición, y maldeciré sus bendiciones. Ya las he maldecido, porque ustedes no se han decidido a honrarme.
JUAN 4: 23 - 24
Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le adoren. Dios es espíritu, y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad.
1 REYES 8:56 - 61
«¡Bendito sea el SEÑOR, que conforme a sus promesas ha dado descanso a su pueblo Israel! No ha dejado de cumplir ni una sola de las gratas promesas que hizo por medio de su siervo Moisés. Que el SEÑOR nuestro Dios esté con nosotros, como estuvo con nuestros antepasados; que nunca nos deje ni nos abandone. Que incline nuestro corazón hacia él, para que sigamos todos sus caminos y cumplamos los mandamientos, decretos y leyes que les dio a nuestros antepasados. Y que día y noche el SEÑOR tenga presente todo lo que le he suplicado, para que defienda la causa de este siervo suyo y la de su pueblo Israel, según la necesidad de cada día. Así todos los pueblos de la tierra sabrán que el SEÑOR es Dios, y que no hay otro. Y ahora, dedíquense por completo al SEÑOR nuestro Dios; vivan según sus decretos y cumplan sus mandamientos, como ya lo hacen.»
SALMO 81:1 - 3
Canten alegres a Dios, nuestra fortaleza;
¡aclamen con regocijo al Dios de Jacob!
¡Entonen salmos!
¡Toquen ya la pandereta,
la lira y el arpa melodiosa!
Toquen el cuerno de carnero en la luna nueva,
y en la luna llena, día de nuestra fiesta.